Cuando el agua de lluvia se filtra a través del suelo, se enriquece con diversos minerales. Generalmente, la cal también entra en el agua a través de un proceso natural: el agua de lluvia absorbe dióxido de carbono del aire y forma ácido carbónico. A continuación, el agua y el ácido carbónico se filtran a través de las capas de roca calcárea del suelo. En este proceso, el ácido carbónico disuelve la cal de la roca. Por tanto, el carbonato cálcico está formado por los elementos calcio, carbono y oxígeno.
El calcio y el magnesio del suelo, en particular, forman la dureza del agua. En sentido estricto, se trata de minerales esenciales para nuestra salud. Esta es la forma natural de la cal del agua, aparte de las medidas que toman las depuradoras para aumentar el valor del pH del agua depurada con minerales, si es necesario.
Así pues, aunque un alto contenido de cal no es el único criterio para aumentar la dureza del agua, sigue desempeñando un papel en ella. La explicación del problema de la cal masiva reside más bien en el plano físico de dos estructuras de cristalización diferentes de la cal del agua. En las aguas que fluyen de forma natural, la estructura de la cal es en forma de cristales de aragonita. Esto es natural y normal. Los cristales de aragonita se mueven en el agua como una arena microscópicamente fina.
Sin embargo, si se fuerza el agua a través de kilómetros de tuberías rectas a muy alta presión, la estructura cambia a estructuras de calcita en forma de aguja. Y cuando aumenta la estructura cambiada debido al calentamiento del agua, la acumulación de cal se convierte en una pesadilla para muchos hogares. El agua se siente áspera en el paladar. Esto podría parecer un riesgo contra nuestra salud, pero el riesgo no está en el contenido de cal en el agua.
El verdadero riesgo para la salud acecha en otra parte. Las algas y bacterias se adhieren a las paredes rugosas de las tuberías y forman biopelícula. El cloro no puede disolver los gérmenes de las paredes de las tuberías, solo actúa en el agua en movimiento que fluye por la tubería. Únicamente el agua que fluye se ve afectada por el cloro y se desinfecta. Pero en las cavidades se crean espacios protectores para los cultivos bacterianos, que a su vez viven de los excrementos de cepas bacterianas anteriores en las cavernas, y que además siguen reproduciéndose.
Ésta es la agua llamada "pura" que llega a nuestras tuberías domésticas.
En el próximo número profundizaré en los diferentes métodos de descalcificación, las distintas opciones disponibles y las distintas opciones y la mejor manera de utilizarlas.